Ya pasada la Segunda Marcha Federal Universitaria y aprobado el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario; quienes tomaron la iniciativa política fueron los y las estudiantes. Surgieron en todo el país asambleas que, poco a poco, fueron haciéndose masivas; la mayoría de las cuales desembocaron en tomas de facultades, clases públicas y nuevas movilizaciones.
Así es que quisimos conocer cómo está viviéndose ese proceso desde dentro. Para ello consultamos a estudiantes de las universidades de Córdoba, Buenos Aires y Rosario.

No digo nada nuevo si digo que los trabajadores – y especialmente los trabajadores jubilados – son el blanco predilecto de los ajustadores. 

El reciente veto al paupérrimo aumento que los legisladores habían concedido a los jubilados nacionales, fue una muestra más de que estos “motochorros vip” privilegian a la tercera edad como víctimas de sus correrías.