Problemas respiratorios, gástricos, renales, hipertiroidismo, cáncer y muchas dolencias más son las consecuencias más visibles de la contaminación ambiental proveniente de la empresa Atanor, productora de varios productos químicos, especialmente utilizados en la agroindustria.
La radio LQSustentable hizo, hace cuatro años, una entrevista con vecinos y vecinas del Barrio Química de San Nicolás, que cuentan el padecimiento de les habitantes del Barrio.
Guillermina Díaz muestra ante la cámara el mapa de la muerte, consistente en un croquis del barrio, donde los propios vecinos se encargaron de ir llenando las manzanas con los nombres de las personas muertas por cáncer y otras enfermedades que ellos atribuyen a la contaminación, particularmente del agua que toman día a día. Al año 2016 (año de la entrevista) el número de fallecidos llegaba a 200 personas, con una incidencia mucho mayor en las cuadras más cercanas a la fábrica.
La lucha de les pobladores es absolutamente desigual y la entrevistada lo expresa marcando que hay vínculos no sólo políticos sino también empresariales entre la justicia, la dirigencia política local y la empresa.
A partir del minuto 10 del video; se entrevista a Ernesto Vivas, ex trabajador de Atanor, que explica el proceso de producción y lo perjudicial que resulta para la salud de los empleados, trabajo que él describe como “inhumano”. Esto además de describir numerosísimas irregularidades de índole de las leyes laborales, que desprotegen a los trabajadores expuestos a este tipo de venenos.
La empresa Atanor tiene numerosas denuncias en su contra y ya han pasado por ella varias inspecciones, algunas de las cuales constataron el mal manejo de los residuos; pero la justicia, a excepción de clausuras por pocos días sin mayores consecuencias a largo plazo, nada ha hecho todavía para proteger la salud de la población, al día de hoy, año 2021.
